Baby Janet y Hulk protagonizan una tarde llena de tensión y deseo. Al principio, la tensión entre ellos parece insuperable, pero todo cambia cuando Baby Janet se va a dormir con una delicada ropa interior que deja poco a la imaginación. Lo que comenzó como un malentendido se transforma en una intensa conexión, llevándolos a explorar sus fantasías más profundas.