¡Increíble pero cierto! si no estoy equivocado creo que es mi primera PILLADAS de El Salvador. Nunca antes había conocido a una chica de aquel país tan lejano y mira tu por donde, una salvadoreña llamada Yiyi Candy cae en mis garras y acaba siendo convencida para follar conmigo. Os voy a decir algo, seguramente muchos de vosotros no hayáis follado nunca con una chica regordita, y ¿Sabéis lo que os digo? Que no sabéis lo que os perdéis! En muchísimas ocasiones las chicas rellenitas son bastante más perras en la cama que las típicas modelos de pasarela, y con Yiyi me ha vuelto a pasar lo mismo. Es tremendo como la chupa, como se monta encima de mi polla y el placer que da follarse a una tía como ella mientras espera ser embestida en la postura del perrito, son ese pedazo de culo a cuatro patas, ¡Tremendo!